jueves, 21 de noviembre de 2013

Mejorar es acción

Hace poco en un programa de radio el entrevistador me preguntaba si realmente es posible mejorar uno mismo.

Mi respuesta fue que es inevitable, - si es que se hace -.

Más allá de la pregunta y de la respuesta del momento, seguí reflexionando acerca de ello...

Son tantas las cosas que suceden sin que ni siquiera tengamos que darnos cuenta... respirar, andar, hacer la digestión... también mejorar o empeorar...Sin que pongamos atención consciente en ello...- tan sólo sucede -

Tal vez tender a mejorar sea una tendencia natural….

También podríamos sorprendernos en la circunstancia de estar tendiendo a empeorar...

Cabe preguntarse ¿Cuál está siendo mi tendencia?

En la perspectiva extraordinaria de observación que me ofrece mi trabajo con las personas y en mi misma, puedo notar que…
    ...A veces mejora el entorno y yo no
    ...A veces mejoro yo y no necesariamente el entorno
    ...A veces no mejora ni una cosa ni la otra...¿Todo se estanca?
    ...A veces todo empeora
    ...Puede empeorar el entorno y yo mejorar
    ...Es fácil que si el entorno mejora, yo también
    ...También se da la circunstancia, mejoro yo y también mi entorno

    ¿Todo sucede de forma circunstancial?
    ¿Cuál es mi intervención en cualquiera que sea la circunstancia?

    Lo que descubro es que pase lo que pase, soy yo y es cada cuál, quien hace algo con ello. 

    Ese HACER es fruto de una decisión, que a su vez es fruto de diferentes elecciones, que se relacionan con toda una posible gama de emociones, creencias, valores y formas de organizarnos a nosotros mismos.

    Y si no le pongo atención, todo esto pasará muy rápido. El resultado puede dar lugar una tendencia a mejorar o tal vez a empeorar.

    Generalmente para cambiar una tendencia o potenciar la ya asistente necesito poner la atención en lo que está pasando y decidir que es lo que quiero que pase con ello.


    A partir de aquí toca explorar ¿Cómo estamos haciendo lo que hacemos?

    Buscando tomar conciencia, haciendo lento eso que funciona tan rápido. Notando eso que hacemos…¿A que da lugar? ¿Qué me explica de mis circunstancias?

    Si tengo una dirección, si se lo que quiero, he de alinear lo que hago y cómo lo hago en base a esa dirección.

    Para ello puedo necesitar actualizar hábitos, aprender nuevas habilidades, generar esa manera de hacer que me asegura la tendencia hacia lo que quiero conseguir.

    Todo esto es un proceso que involucra tanto a la atención como a  la decisión de acción.

    Así que llevará tiempo, esfuerzo, aprendizaje…..

    Compruebo que si puedo automatizar el propio comportamiento de mejorar, de manera efectiva, también disfrutable, entonces comienza a ser posible “liderar” mis circunstancias y con ello “liderar mi vida”.

    Concha Durante
    Coaching para ti

    1 comentario:

    Mel Prado dijo...

    Te como toitaentera... olé... pura belleza instantánea... meticulosa y claraaaa.... clarísisima... claribella... Mancantao...!!!